En defensa del lobo ibérico y sus hábitats, desde 1999
Daños causados por lobosLas competencias de agricultura, ganadería y medio ambiente están prácticamente transferidas a las comunidades autónomas, por lo que son éstas las responsables de establecer políticas y programas de compensación de daños ocasionados por fauna silvestre, proporcionar recomendaciones y asesoramiento a los ganaderos y establecer los medios para mitigar los posibles ataques de animales salvajes o asilvestrados sobre la cabaña ganadera. Puede resultar interesante consultar nuestro artículo sobre Medidas de defensa del ganado. A este efecto la mayoría de las comunidades autónomas con presencia de lobo ibérico tienen habilitadas partidas en sus presupuestos para ofrecer a los ganaderos compensaciones en el caso de que la gestión del ganado haya sido apropiada y se compruebe que el daño producido lo ha sido efectivamente por fauna silvestre. Estos programas de compensaciones establecen determinadas condiciones que debe cumplir el ganadero para poder optar a la compensación, como por ejemplo denunciar el ataque en las primeras 48 horas tras producirse y que un agente de medio ambiente dictamine in situ que efectivamente se trata de un ataque de fauna silvestre. Estas determinaciones son con frecuencia difíciles si no se llevan a cabo análisis de ADN (saliva, heces, pelos), que son lentos y caros. En la práctica se estudia el tipo de ataque, se buscan pelos u otros rastros del animal atacante y es el agente de medio ambiente el que emite un juicio sobre el caso. Las normas de compensación de las diferentes comunidades autónomas establecen baremos según el tipo de animal atacado (vacuno, ovino, caprino, caballar), la edad de los animales muertos, su número, su aprovechamiento (carne, lana) o algunos más específicos (como por ejemplo el nivel de pureza de la raza de un caballo). Además, dichas normas establecen también topes de compensación por ataque, que limita el importe total de la compensación sea cual sea el efecto del ataque. Las administraciones autonómicas son notablemente lentas o sordas a las demandas de los ganaderos. Alguna, como por ejemplo el Gobierno de Cantabria, han llegado a pagar los daños cuatro años después de producirse el ataque o hacen caso omiso a las peticiones de los ganaderos afectados. IMPORTANTE: Que un presupuesto incluya una partida destinada a compensaciones a explotaciones ganaderas por daños producidos por ataques de fauna silvestre no implica que ese presupuesto se ejecute. Muchas veces las administraciones públicas no responden a las denuncias de ataques y no pagan los daños producidos, o las pagan varios años más tarde. Por ejemplo, en Castilla y León el presupuesto anual para indemnizaciones es de 200.000 € pero entre 2010 y 2012 el importe total de las indemnizaciones pagadas por la Junta fue de 108.164 € (Fuente: Procurador del Común de Castilla y León). ¿Lobos o perros asilvestrados?¿Qué otros animales pueden producir daños en rebaños que puedan parecer de lobo? En palabras de Fernando Jubete, biólogo y miembro de ASCEL, en declaraciones a Carrión Digital: En Pirineos se ha asentado una población de lobos en la Sierra del Cadí. En ese momento se produjeron ataques, el Gobierno Catalán realizó protocolos mediante el análisis de saliva y dejó patente que de los 100 expedientes que pagaron un año por supuestos ataques a lobo se pasó a 7 al siguiente tras realizar los análisis. El motivo, la mayor parte de los ataques eran de perros asilvestrados que, curiosamente, proceden de las explotaciones ganaderas. En Álava se han realizado análisis a las heces de los perros asilvestrados y a los lobos; en ese estudio queda patente que los lobos comen Fauna Silvestre y los perros asilvestrados ganado doméstico. En el Reino Unido, donde no hay lobos, los zorros y los perros asilvestrados son culpables de la muerte de 25.000 corderos y en España no tenemos ni una sola denuncia de muerte de corderos por ataque de perros o zorros. [Referencia] Es un hecho conocido que los perros guardianes de ganado no atacan a sus propios rebaños, pero sí a otros rebaños diferentes al suyo, y que este hecho está fomentado cuando los ganaderos alimentan a los perros con despojos de especies ganaderas, lo cual enseña a los canes que esos animales son presas comestibles. Como curiosidad, durante los años 90 se pusieron de moda los perros de razas nórdicas (Husky, Alaskan Malamute), por lo que proliferaron los criaderos de dichas razas, que son conocidas por su carácter independiente y su propensión a escapar y hacer su vida. Ávila fue uno de los lugares en las que se establecieron estos criaderos, a la vez que hacía más de cien años que el lobo había desaparecido de la provincia. Cuando los perros escapaban y atacaban a los rebaños para alimentarse, muchos ganaderos confundían — comprensiblemente — a los perros con lobos, difundiendo la falsa noticia de que el lobo estaba presente en comarcas que aún deberían esperar una década para tener presencia real de lobo. Seguros agrariosAdemás, el Ministerio de Agricultura viene haciendo campañas de promoción de seguros para ganaderos con el fin de que se cubran los daños producidos. Para ello el Estado dispone de una Empresa Nacional de Seguros Agrarios (ENESA) y de la empresa Agroseguro. Sin embargo los ganaderos vienen siendo reacios a contratar dichos seguros porque los ven como un coste añadido sobre sus explotaciones, y los propios sindicatos agrarios tienen una actitud escéptica. Partidas presupuestarias destinadas a cubrir daños ocasionados al ganado por ataques de fauna silvestreIncluimos a continuación una tabla con los datos de asignaciones presupuestarias para el pago de compensaciones por ataques de fauna silvestre al ganado, tomadas de los presupuestos de las diferentes comunidades autónomas donde se registra una mayor actividad del lobo ibérico. Es importante tener en cuenta que estas indemnizaciones lo son para ataques producidos por todo tipo de fauna silvestre (osos, rapaces, córvidos, mustélidos, etc.), no sólo lobos. Año presupuestario 2014
1 Aunque el Gobierno de Cantabria publica sus presupuestos públicos, no se ha encontrado ninguna partida presupuestaria cuyo concepto se ajuste claramente a una reserva de fondos para compensación de daños por ataques al ganado por parte de fauna silvestre. 2 Ha sido imposible determinar la partida presupuestaria concreta, aunque la cifra se ha extraído de declaraciones del Consejero de Medio Ambiente de la Comunidad de Madrid, Borja Sarasola. [Referencia] Comentario. Es imposible no fijarse en el caso anómalo del Principado de Asturias, con un presupuesto que es cuatro veces el de Castilla y León, teniendo menos territorio, menos manadas y menos porcentaje de población activa dedicada a título principal a la explotación ganadera. Su presupuesto en compensación de daños supone un 74% del total de las cinco comunidades autónomas comparadas. En el Principado de Asturias el lobo ibérico no es una especie cinegética, siendo los Agentes de Medio Ambiente los que abaten animales siguiendo una política de control de poblaciones mediante escopetas. Así pues, todo el ciclo de compensaciones por daños queda en manos de la administración pública, sin que tenga que dar explicaciones a nadie sobre cómo se hace y se deshace y cómo se reparte el dinero. Un ciclo perfecto de arbitrariedad político-administrativa. Es interesante relacionar estos hechos con el punto El fraude en las indemnizaciones, donde el Principado de Asturias aparece repetidamente mencionado. El fraude en las indemnizacionesExisten montones de historias sobre cómo personas sin escrúpulos se aprovechan de ayudas públicas para paliar los daños a la ganadería cometiendo un presunto fraude: el ganadero que compró potros a 30 € para abandonarlos en el monte a sabiendas de que serían muertos por los lobos, los nuevos apicultores que compraron colmenas sólo para dejarlas en el camino del oso, los ganaderos que recolocan los corderos muertos por perros en lugares que no les inculpen de negligencia, cobro doble de indemnizaciones de la comunidad autónoma y del seguro agrario... Tristemente muchos de estos casos ocurren en Asturias. En 2013 la población de lobos en Asturias está estimada entre 200 y 300 ejemplares (Fuente: Roberto Hartasánchez, FAPAS) y el prespuesto del Principado de Asturias para indemnizaciones es de 850.000 € (Fuente: Principado de Asturias, 2014), mientras que en Castilla y León el número de individuos de lobo es de unos 1.600 (Fuente: Junta de Castilla y León) y el presupuesto anual (que no se cubre) es de 200.000 € (Fuente: Junta de Castilla y León, 2014). Los ejemplos de estos presuntos fraudes son numerosos. Sólo hay que acudir a la prensa para informarse, y luego sacar las conclusiones que se crean oportunas:
07/04/2017 09:37 CEST
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Si quieres colaborar en la defensa del lobo ibérico: España
Portugal
Muy recomendable
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